Encina de Etxeita en Garai (Bizkaia)

No es extraño encontrar en los alrededores de este municipio pequeños bosques que recuerdan los amplios encinares que cubrieron gran parte estas laderas. 

Algunos ejemplares de estos árboles fueron conservados entre los pastizales y podados sistemáticamente para dilatar el tamaño de sus copas, aumentando así su producción de bellotas y la sombra bajo la que se refugiaba el ganado.

En un entorno tranquilo y sosegado, en un verde prado en ladera, se localiza esta bella encina de la especie Quercus ilex ilex. La poda periódica y sistemática de sus ramas a lo largo de varias generaciones, con el fin de conseguir alimento para el ganado, ha ido modelándola hasta adquirir su peculiar forma actual, caracterizada por la anchura y simetría de su copa y la densidad de su follaje. Proyecta una tupida sombra que, por la amplitud de su copa, cubre una considerable superficie, bajo la cuál se dice que ha llegado a cobijarse un rebaño de unas 360 ovejas.

Está situada en el Municipio de Garai accediendo desde la carretera dirección a Goiuria, en terrenos del caserío Etxeita. Hay que descender un kilómetro por una estrecha carretera frente a la ermita de Santa Kataliñe (donde se encuentra el cartel de Goierri Auzoa) hasta dar con el árbol, que se encuentra a unos 100 metros del caserío Etxeita. 

Está declarado Árbol Singular del País Vasco. Tiene más de 19 metros de diámetro y su copa más de 60 metros de circunferencia. Sus características más notables son su simetría, belleza, densidad de follaje y morfología característica por el crecimiento. 

La Ley 16/1994, de 30 de junio, de Conservación de la Naturaleza del País Vasco, establece la figura del Árbol Singular con el fin de proteger aquellos ejemplares de árboles de características extraordinarias que destaquen por razón de su tamaño, edad, historia, belleza o situación. 

Mediante Decreto 265/1995, de 16 de mayo, se procedió a una primera declaración de Árboles Singulares, labor que tuvo su continuación con el DECRETO 23/1997, de 11 de febrero, por el que se realizó una segunda declaración de Árboles Singulares en la Comunidad Autónoma del País Vasco, incrementando la lista inicial de árboles protegidos.